¡¡¡Mamá, mamá!!! me ha parecido ver un friki...

Hoy, 25 de Mayo, es El Día del Orgullo Friki. Sí, hoy, hace 32 años, se estrenó La Guerra de las Galaxias...

Es curioso, porque frikis han existido siempre, lo que pasa que antes no los llamábamos así. Hoy se considera friki a todo ése Peter Pan que se niega a crecer para vivir continuamente en una adolescencia en la que su universo particular lo forman los héroes del cómic, el manga, las partidas de rol, los libros de fantasía y ciencia ficción, los sueños húmedos con la princesa Leia y sus ensaimadas, y las películas de serie z. O sea, lo que toda la vida fué un raru de cojones, pero que ahora, en la era de internet y la comunicación, se ha rebautizado como "friki", versión castiza del vocablo anglosajón "freak" (fanático).

Como decía, frikis han existido siempre, pero, al igual que ocurriese con el movimiento obrero, hasta que no tomaron conciencia de sí mismos, los frikis no existieron oficialmente como tales. Es lo que entedemos como "conciencia friki". Y aquí reside su peligro: el movimiento friki está en todas partes y tiene más fuerza que ningún otro, porque los frikis se saben raros y actuan como tales. Alguien que es capaz de aprenderse de memoria los 203 dialectos de la Tierra Mieda, tiene más peligro que un mono con dos pistolas.

Pero seamos un poco justos con los frikis, porque quien más, quien menos, tiene uno en su interior (para muestra mi anterior post). ¿Quién se atreve a negar que no ha soñado alguna vez con batir en duelo de sables láser a Darth Vader, o que era el único capaz de tirar el Anillo de Poder a las fauces ardientes del Monte del Destino? Éso sí, no caigamos en el frecuente error de llamar friki al primero que pase por la calle. Si yo conozco al dedillo los nombres de los planetas del Borde Exterior del universo STAR WARS, o sé distinguir sin mucho esfuerzo las diferentes razas y seres de la Tierra Media, éso no quiere decir que sea un friki, sino más bien una persona culta, que es muy diferente. No intentemos ocultar nuestra ignorancia en el desprecio ajeno.

Reflexiones aparte, mi intención no es más que felicitar a todo aquél que se sienta friki y viva este día de forma especial. FELIZ DIA DEL ORGULLO FRIKI. Bebed hidro-miel en mi honor y matad a unos cuantos dragones para festejarlo. Al menos vosotros sois felices, cosa que pocos adultos pueden decir...

¡Que el frikismo os acompañe!